Lo principal es que la crítica es difícil de aceptar, y especialmente, cuando se critica nuestra manera de criar a los hijos. Recibámosla como hombres y estemos agradecidos por ella, como si fuera una corrección amorosa de parte de nuestro Padre celestial. Estaba en una conferencia con varios otros pastores que también son mis amigos. Una tarde, durante un receso, terminamos conversando mientras bebíamos café. Uno de los hombres del
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